CUIDADO DE NUESTRA MASCOTA EN INVIERNO

Ya está próximo el invierno y como propietarios tenemos que tener en cuenta una serie de pautas para el cuidado de nuestra mascota en esta estación del año.
La estación más fría presenta una serie de problemas específicos y exige tomar determinadas precauciones.

¿Cuándo cortar o arreglar el pelo al perro por última vez?
Hacia el mes de Octubre y sin dejarlo demasiado corto. El tópico de que no se debe bañar a nuestras mascotas en invierno es falso, si podemos bañar a nuestro compañero en invierno pero siempre llevando una serie de pautas para evitar que nuestra mascota se nos enferme. Al bañar a nuestra mascota debemos secarlos minuciosamente y después pasarle el secador para evitar que el perro quede húmedo y pueda enfermarse.

¿Hay que sacar menos al perro cuando hace frio?
El Frio seco no es tan desagradable como el frio húmedo. Los perros que se mueven mucho son menos sensibles que los perros más lentos. Los perros de pelo largo resisten mejor el frio que los de pelo corto. Pero esto no quiere decir que tengamos que tener a nuestra mascota todo el invierno encerrado en casa por miedo a que se nos constipe tenemos que seguir sacando a nuestras mascotas. Existen numerosos artículos para proteger a nuestro perro de la lluvia y el frio e incluso existen botitas para las patas.

¿Un abrigo en invierno?
Si tenemos un husky siberiano, o un Alaskan malamute ponerles un abrigo en pleno invierno es un absurdo esto no quiere decir que no podamos protegerlos de la lluvia, pero si el frio es húmedo a los perros viejos que no tienen pelo o perros de pelo corto que están acostumbrado a vivir en pisos calientes se les debe poner una prenda de abrigo para protegerlos del frio.

¿Medidas preventivas contra resfriados?
Después de dar un paseo en un día frio y húmedo de invierno hay que secar al perro con una toalla y con el secador, si lo soportan. Los perros, como nosotros, pueden resfriarse y sufrir cistitis

El cuidado de las patas:
Antes de salir de paseo por la nieve, póngale aceite o crema en las pezuñas y báñelas en una infusión de manzanilla caliente después del paseo. Es un buen procedimiento para proteger las patas contra la sal que a veces se esparce sobre la nieve.

Comer nieve:
A los perros les gusta hacerlo, pero no es sano; puede causar diarrea o gastritis si se ingiere con el estómago vacío. Si eso ocurre, hay que llevar al perro al veterinario.