También conocida como galápago de florida o tortuga de orejas rojas, es una subespecie de tortuga semiacuatica perteneciente a la familia de Emydidae, originaria de la región que comprende el sureste de los Estados Unidos y el Noreste de México, aunque en la actualidad se encuentra en muchas otras partes del mundo gracias a su comercio como mascota.
Esta especie se ha convertido en la tortuga más comercializada del mercado y en una de las mascotas más populares en los últimos años, debida a que su cuidado es relativamente sencillo.
El caparazón de esta especie puede alcanzar hasta los 30 cm de longitud, aunque se han encontrado ejemplares de más de 40cm. Las hembras suelen ser un poco más grandes que los machos. Llegan a vivir entre 20 y 30 años pero en cautiverio su esperanza de vida es menor dependiendo en medida del habitad en que se encuentre.
Esta especie es omnívora y se les puede proporcionar una gran variedad de alimentos diferentes incluyendo plantas y otros animales. Esta gama de comida incluye el alimento que podremos encontrar en cualquier tienda de mascotas. También deberemos proporcionarle calcio que es esencial para la salud de su caparazón y para afilar sus labios.
Las tortugas mas jóvenes tienden a ser carnívoras y mediante van creciendo se vuelven mas herbívoras cuando tienen menos de tres años necesitan recibir muchas proteínas pues están en una etapa crucial de su crecimiento. La frecuencia con la que deben ser alimentadas depende de su edad, mientras más pequeñas mas raciones deberemos proporcionarles (hasta tres veces al día) a los ejemplares adultos se les pueden proporcionar una vez al día seis veces por semana. Siempre asegurándonos de que quede satisfecha. Las tortugas necesitan el agua para poder tragar la comida, dado que no producen saliva.
En invierno suelen invernar y no comen ni defecan y en verano se les puede dar de comer de dos a tres veces al día, esta especie necesita mas alimento en los días de calor.
La tortuga debe conservarse en un acuario o tortuguera u otro recipiente siempre en proporción con su tamaño, esto es lo primero que deberemos tener en cuenta para su ubicación. Una lámpara de calor es recomendada para las tortugas que no pueden ser expuestas a la luz del sol y estas deberán tener acceso a ella durante 3 o 4 horas al día.
Las tortugas pueden llevar a contraer enfermedades en:
1.Caparazón
2.Ojos
3.Respiratorias
4.Digestivas
5.Ansiedad y estrés
Y sabiendo todo esto, deberemos tener en cuenta que es un animal no un juguete y si no podemos proporcionarle los cuidados necesarios es mejor seguir de largo……
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Buon articulo, greeting from Belgium
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